Como ya sabemos, cuando viajamos en coche con un recién nacido, es esencial que sigamos unas reglas para garantizar que nuestro viaje sea tranquilo y seguro.
Ya desde el primer trayecto que llevaremos a nuestro bebé del hospital a casa, deberemos llevar a nuestro pequeño recién nacido en coche. Por este motivo, es importante equipar nuestro vehículo con los elementos más adecuados para llevar al bebé, siempre garantizando confort y seguridad en cada fase de su crecimiento.
Primero de todo, debemos asegurarnos que el bebé tenga una postura correcta, y la máxima protección en sus zonas más vulnerables: cabeza, cuello y tórax.
Tenemos diferentes formas de llevar al pequeño: en sillas para el coche o en un capazo. Este último, aunque sea un método homologado no lo recomendamos.
¿Qué tipo de silla de coche es más indicada para un recién nacido?
Si nuestro bebé es recién nacido, debemos tener dos factores en cuenta: la seguridad y el confort.
En primer lugar, cuando nos referimos a seguridad, la forma más segura es a contramarcha, y como mínimo hasta los 4 años de edad del pequeño, ya que poner al bebé mirando hacia delante cuando es muy pequeño puede suponer un riesgo.
Debemos pensar que proporcionalmente, la cabeza de un bebé es mucho más grande que la de un adulto. Supone hasta un 30% de su peso corporal, en cambio, la de un adulto es solo de un 5%. Además, su cuello no está osificado, por lo que no puede resistir la fuerza que se ejerce sobre él en caso de un impacto. Por este motivo, la única forma de protegerlo es con una silla a contramarcha.
Además de la silla vaya a contramarcha, deberemos mirar otros elementos de seguridad para controlar el vuelco y el retroceso. Es también importante la solidez de la estructura de la sillita y los materiales de absorción.
Si hablamos de confort, es esencial que una silla de coche tenga una reclinación adecuada para que la cabeza no se le caiga hacia delante, y un diseño que permita que el bebé esté cómodo y protegido. Además, es muy importante para evitar su asfixia postural.
Por ello, recomendamos recibir asesoramiento especializado y probar la silla antes de comprarla por si nuestros asientos pueden restar reclinación a la silla.
Principal normativa para sillas de bebé: Plus Test
En primer lugar, que una silla sea homologada no quiere decir que sea segura. Homologado es sinónimo de legal, no de seguro.
- Plus Test:
Esta es una normativa que realiza el gobierno sueco, pionero en seguridad a nivel mundial, la cual mide y se limita la carga cervical. Es una prueba que se realiza en condiciones muy exigentes para corroborar el límite de resistencia que puede aguantar el cuello de un bebé para aprobar las sillas de coche. Debemos tener en cuenta que solo 30 sillas superan esta exigente prueba y la mayoría son sillas a contramarcha. Por lo tanto, ya vemos que es importante que las sillas que compremos tengan el sello Plus Test.
Últimos tips para una retención infantil segura
Ya sabemos que las sillitas para el automóvil, es probablemente la medida de seguridad más importante para los niños. A continuación, os mostramos otras recomendaciones para viajar con recién nacidos:
- La silla debe ser específica y homologada especial para recién nacidos y bebés pequeños, de este modo se previenen hasta el 90% de las lesiones graves o mortales que se pueden producir en caso de problemas. Debemos saber que nunca hay que llevarlos en brazos.
- Para el día que se dé a luz debemos tener ya una silla preparada en el coche. Recomendamos tener especial cuidado con las sillas de segunda mano, ya que no pueden proteger igual y no estar en óptimo estado.
- Debemos practicar como instalar la sillita adecuadamente antes de colocar al niño.
- Tanto en trayectos largos como en trayectos cortos, el pequeño debe viajar con un sistema de retención infantil apropiado para su altura y peso.
- Cuando el pequeño ya es más mayor, intentar que no vaya demasiado erguido. Se recomienda una posición intermedia entre horizontal y vertical.
- También debemos tener en cuenta que a medida que el niño crezca debemos ir cambiando de silla.
- Es obligatorio que los niños vayan en los asientos traseros. Solamente hay excepciones como que los asientos traseros ya estén ocupados por otros niños detrás o con otras sillitas.
- El asiento más seguro es el central trasero. El motivo es que está más alejado de las puertas. Aunque hay anclajes que solo se pueden instalar en los dos asientos laterales, en este caso, sería recomendable colocar el asiento detrás del copiloto para tener mayor visibilidad del pequeño.
- Debemos evitar colocar al niño mirando hacia atrás en el asiento del copiloto si no se puede desactivar el airbag antes.
- Como hemos explicado anteriormente, intentaremos que la retención infantil sea siempre homologada. Si sigue las normas de homologación, quiere decir que ha sido sometido a determinadas pruebas de seguridad antes de su venta.
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